Chile es descrito en su himno nacional como la “Copia Feliz del Edén”. Con más de 4.000 kilómetros del norte al sur, la Cordillera de Los Andes por el este y el Océano Pacífico por el oeste, su geografía y sus colores cambian constantemente, al igual que su flora y fauna. La naturaleza es la real protagonista de Chile, y “geo-turisteando” tendrán la oportunidad de conocerla desde cerca y ser parte de ella.
Norte
El norte de Chile ofrece un contraste único entre el Desierto de Atacama, el más árido del mundo, y los fértiles valles y oasis del altiplano. La imponente geografía da pie a paisajes asombrosos, como el Valle de la Luna y el Salar de Atacama, acompañados de los espectaculares geysers y volcanes. Pueblos indígenas, sitios arqueológicos y museos aportan a la gran cultura del lugar. Destacan antiguas salitreras, hoy convertidas en pueblos fantasma; al igual que algunas de las minas más grandes del mundo, actualmente en funcionamiento. Cielos despejados la mayor parte del año proveen un escenario perfecto para los muchos observatorios astronómicos instalados en la zona. Verdes valles aparecen inmersos en el desierto y proveen el famoso Pisco chileno. Cálidas playas cubren prácticamente toda la costa del norte e invitan a disfrutar de las bondades gastronómicas del mar.
Lugares recomendados: Lago Chungará, Pampa del Tamarugal, Valle de la Luna, Oficina Salitrera Humberstone, San Pedro de Atacama, Geysers del Tatio, Mina de Cobre Chuquicamata, Parque Nacional Pan de Azúcar, Desierto Florido (sólo cuando ha llovido), Parque Nacional Llanos de Challe, Punta de Choros y Chañaral de Aceituno, Valle del Elqui, Observatorio El Tololo, Parque Nacional Fray Jorge, zonas costeras entre La Serena y Pichidangui.
Centro
El centro de Chile combina perfectamente la cordillera con la costa, aprovechando también el verde de sus valles centrales. La corta distancia entre los centros de esquí y las playas permite pasar de estar esquiando a estar surfeando en cosa de horas. Ciudades puerto y caletas de pescadores llenan de encanto y colores las costas, mientras extensas viñas invitan a catar sus vinos en los valles trasversales. La gastronomía destaca tanto en estos valles como en la costa. Antiguos balnearios aportan historia y cultura a esta zona.
Lugares recomendados: puerto de Valparaíso y Viña del Mar, Isla Negra, Santo Domingo, Centros de Esquí, Rutas del Vino, Lagos Rapel y Vichuquén, balnearios de Zapallar, Cachagua y Maitencillo; Cajón del Maipo, Matanzas, Pichilemu.
Sur
Lagos, ríos, bosques y volcanes marcan los paisajes del sur de Chile. Más al sur los campos de hielo y glaciares se toman el paisaje. Los colonos alemanes aportan con la cultura, distinguiéndose su influencia en las construcciones y en la gastronomía. La Isla de Chiloé – la más grande de Chile - mantiene aún muchas de sus costumbres, las cuales están influenciadas por la mitología y el catolicismo; destacan también sus construcciones arquitectónicas de madera, los palafitos y sus iglesias. Llegando a la Carretera Austral comienza una mezcla de bosques, lagos, ríos y glaciares, finalizando a las puertas de los Campos de Hielo Norte, destacando hermosos paisajes y su sacrificada gente. En el extremo sur aparece la Patagonia, donde muchos de los paisajes parecen nunca tocados por el hombre: campos de hielo, parques nacionales, fiordos y la cordillera que cae directo al mar; entre otros marcan estos paisajes que parecen copiados del edén.
Lugares recomendados: Termas de Chillán, Parque Nacional Conguillío, Ruta de los Volcanes, Ruta de los Lagos, Parque Nacional Puyehue y Termas Aguas Calientes, Isla de Chiloé, Carretera Austral, Parque Nacional Torres del Paine, Cabo de Hornos, Estrecho de Magallanes, Tierra del Fuego.
